Las cazuelas son buenas para desayunos y cenas: cocinar, por regla general, no lleva mucho tiempo y tienen un alto nivel de saciedad y valor nutricional. Ofrecemos una receta para una cazuela de verduras con requesón, aromatizada con hierbas aromáticas y parmesano rallado. Es jugoso, con cuerpo y, a pesar de la abundancia de jugosas verduras, es bastante denso. El secreto está en los cubos de pan blanco, que absorben la humedad y espesan la textura de la cazuela. Es mejor servir el plato caliente; en este estado, la cazuela es mucho más sabrosa.