Pastel con requesón y hojaldre de hojaldre con fresas al horno
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Cocina
Mundo
Contenido calórico
149,7 kcal
Porciones
4 puertos.
Hora de cocinar
45 minutos
Proteínas *
6,3 gr.
Grasas *
10,7 g
Carbohidratos *
21,8 g
Un pastel así no dejará indiferente a nadie. Una base crujiente de galletas de mantequilla, un delicado relleno de cuajada y unas espectaculares fresas en gelatina en la superficie no solo son muy sabrosas, sino también hermosas. Tales productos horneados pueden convertirse en el punto culminante de una fiesta de té festiva, y de manera absolutamente justificada. Recomendamos usar requesón graso para que el sabor del relleno de requesón sea más cremoso. Tomamos fresas frescas: las congeladas no darán tal atractivo visual, ya que pierden su forma al descongelar.
Ingredientes
Proceso de cocción
A continuación, tamice la harina junto con el polvo de hornear y vierta en la mezcla de huevo y aceite. Amasamos la masa con las manos, es recomendable hacerlo rápido. La masa resulta blanda, pero manteniendo bien su forma, no se pega a las manos. Envolvemos la masa en film transparente y la metemos en el frigorífico de quince a veinte minutos. La masa se enfriará y se endurecerá.
Mientras la masa se enfría, prepara el relleno de cuajada. Coloque el requesón, la crema agria grasa en un tazón, rompa los huevos, agregue azúcar granulada, azúcar de vainilla, almidón de maíz y sémola. Con una batidora de inmersión, perforar todos los ingredientes hasta obtener una masa homogénea y los cristales de azúcar completamente disueltos.
Precalienta el horno a una temperatura de 180 grados. Ponemos un molde con base de arena y relleno de cuajada en el nivel medio de un horno ya caliente y horneamos durante unos cuarenta minutos. Los tiempos de horneado pueden variar ligeramente según el horno específico. Nos enfocamos en el hecho de que al final de la cocción, la torta de corteza quebrada debe dorarse en los bordes y el relleno adquirirá un tono cremoso cálido. Sacamos del horno el producto terminado y lo dejamos enfriar por completo.
Con un cepillo de silicona, engrase las fresas con una solución de gelatina enfriada. Vierta el resto del líquido entre las rodajas de fresa. Retiramos la torta formada en el refrigerador durante una hora o dos. Durante este tiempo, la gelatina se enfriará y endurecerá por completo, y el relleno de cuajada se estabilizará.
¡Buen provecho!